Viajar con cáncer de páncreas
Cuando se recibe un diagnóstico de cáncer de páncreas, tomarse unas vacaciones lujosas no parecería ser una estrategia de tratamiento inteligente. Sin embargo, cada vez más médicos recetan viajes a los pacientes que disfrutan de ver el mundo.
“El objetivo es brindar atención según las prioridades del paciente”, explica el Dr. Sunil R. Hingorani, Ph.D., anteriormente del Fred Hutchinson Cancer Research Center y exdirector fundador de la Pancreas Cancer Specialty Clinic en Seattle Cancer Care Alliance. (Hingorani ahora está en el University of Nebraska Medical Center, Omaha). Así que, sí, puede y debe emprender ese anhelado viaje a Europa. Es responsabilidad del médico programar descansos del tratamiento y cambiar el calendario de dosificación en consecuencia.
De hecho, los estudios demuestran que para los pacientes con cáncer, viajar está asociado con mejores resultados, y no porque los pacientes viajen para obtener atención médica.
Estrategias para un viaje seguro
Viajar con cáncer de páncreas no siempre es fácil, pero para muchos pacientes la experiencia merece la pena. Ya sea que viaje para pasar tiempo con la familia o ver el mundo y todo lo que este tiene para ofrecer, estas 10 estrategias pueden ayudarle a superar los desafíos que encontrará en el camino.
Planifique con anticipación. Apenas tome la decisión de viajar, comience a considerar la logística. “Hable con su médico para crear un plan para el peor de los casos”, sugiere el Dr. David Zhen, médico oncólogo de Seattle Cancer Care Alliance y profesor asistente de Medicina en University of Washington. “Tener un plan listo puede ayudarle a sentirse más cómodo con el viaje”. De acuerdo con el destino del viaje, el médico podría incluso darle un número de contacto o el nombre de una institución en donde pueda recibir atención en caso de ser necesario.
Lleve la documentación. Pídale al médico que imprima un resumen de su enfermedad, alergias, medicamentos y plan de tratamiento. De ese modo, tendrá la documentación disponible en caso de que necesite reunirse con un equipo médico en su destino.
Lleve los medicamentos. En lugar de empacar los medicamentos en el equipaje que despacha, guarde todos los medicamentos recetados, suplementos y medicamentos de venta libre en su equipaje de mano. De hecho, considere llevar medicamentos para todos los problemas posibles, incluidos medicamentos para el dolor, contra las náuseas y esteroides.
Beba mucho. Es importante que se mantenga hidratado durante los viajes, en especial cuando toma muchos medicamentos. “Si viaja al exterior, asegúrese de beber agua embotellada”, dice Zhen.
Enfóquese en los alimentos. Coma lo que desee. Si viaja a tierras extranjeras donde no le gusta o reconoce la comida (o en aviones con comida terrible), lleve refrigerios con abundantes calorías que pueda comer en un momento de apuro.
Hable con su médico. Asegúrese de que el doctor lo autorice a viajar y pregúntele si hay algo que usted pueda hacer para reducir el riesgo de sufrir complicaciones. Si sus hemogramas están bajos o el plan de tratamiento es particularmente agotador, un viaje podría aumentar el riesgo de contraer una enfermedad o infección. Podría necesitar vacunas para viajar a ciertos destinos. Y si viaja en avión, el médico le podría recetar medicamentos para evitar la formación de coágulos. (Los viajes en avión elevan el riesgo de que se formen coágulos de sangre, un riesgo que ya es elevado para los pacientes con cáncer de páncreas).
Compre seguro de viaje. El seguro de viaje puede ofrecer un resguardo en caso de que no pueda viajar en el último minuto. La mayoría de las empresas de tarjetas de crédito ofrecen seguro de viaje cuando paga por el viaje con su tarjeta. Advertencia: asegúrese de verificar que la póliza cubra afecciones preexistentes (como cáncer de páncreas).
Pida ayuda. No tenga miedo, ni vergüenza, de pedir arreglos especiales en el aeropuerto y cuando llegue a su destino final. ¿Le resultaría más cómodo llegar a la puerta en una silla de ruedas? Llame a la aerolínea con anticipación. ¿Tener más almohadas le ofrecería más apoyo al dormir? Pídale al empleado del hotel que deje algunas de más en su habitación. La mayoría de los gerentes de los hoteles se complacen en organizar todo para asegurarse de que usted disfrute de una estadía cómoda.
Protéjase. Asegúrese de empacar un sombrero de ala ancha, protector solar, repelente de insectos y demás productos esenciales para protegerse del sol y otros peligros de las vacaciones. Si se ha sometido a quimioterapia o si está tomando otros medicamentos, su piel podría estar más sensible.
¡Diviértase! “En lo posible, intente no pensar en el cáncer durante las vacaciones”, dice Hingorani. En cambio, relájese, disfrute y ponga su atención en construir recuerdos. Estos recuerdos no solo son importantes para el paciente, sino también para sus seres queridos.
Viajar por placer le ofrece al cuerpo un descanso del tratamiento y fortalece el ánimo. Además, tendrá la oportunidad de probar la cocina local, darse el gusto con sus platos preferidos y experimentar algunas aventuras por primera vez.
Viajar por atención médica
Algunos pacientes con cáncer de páncreas eligen viajar para recibir tratamiento y participar en un ensayo clínico. Según un estudio publicado en la revista médica Journal of the American College of Surgeons, cerca del 25 por ciento de los casi 23,000 pacientes con cáncer de páncreas analizados viajaron por estas razones. Pero muchos de los consejos para los viajes de placer también se aplican a los viajes para tratamiento.
Si viaja para obtener atención médica, primero considere si existen opciones cerca de casa. “A menos que exista una razón realmente convincente para viajar a una institución que quede lejos, no aliento a los pacientes a dejar su entorno familiar”, dice Hingorani. “Las mejores ideas para el cuidado de pacientes con cáncer de páncreas se están estudiando en múltiples lugares”.
Existe la posibilidad de que pueda encontrar atención de vanguardia cerca de su hogar donde cuenta con el apoyo de amigos y familiares y donde también puede visitar su cafetería preferida.