Síntomas
27 de junio, de 2016 • 3 Min

La conexión entre el cáncer de páncreas y la diabetes

Abstract photo of many silver balls packed together

Josep; Flickr

Ictericia, pérdida de peso, disminución del apetito, dolor de espalda. Estos son síntomas imprecisos que pueden indicar muchas cosas, entre ellas cáncer de páncreas avanzado. Y aunque esto no es un dato tan conocido, lo mismo puede suceder con un diagnóstico repentino de diabetes, en particular en personas de más de 50 años que nunca antes habían tenido diabetes.

Desde hace 150 años que los médicos saben acerca de la conexión entre el cáncer de páncreas y la diabetes, dice el Dr. Suresh Chari,* jefe del Pancreas Interest Group en la unidad de gastroenterología y hepatología de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota. Sin embargo, solo recientemente se ha llegado a una mejor comprensión de esa conexión.

En 1998, durante una beca de investigación en Mayo Clinic, Chari leyó un artículo del New England Journal of Medicine de 1994 que sugería que el páncreas segregaba una hormona que causaba diabetes en pacientes con cáncer de páncreas. “El artículo era interesante”, recuerda.

Chari y sus colegas intentaron repetir los hallazgos, sin éxito. Pero lo que presenciaron en el curso de su investigación lo sorprendió. Descubrió que la mitad de los pacientes con cáncer de páncreas que había tratado tenían diabetes. “Fue un descubrimiento fortuito y me hizo preguntarme si la diabetes se presentaba antes del cáncer, y si era así, cuánto tiempo antes”, dice el Dr. Chari.

Durante los próximos años, el médico se dispuso a averiguarlo. Su trabajo y los estudios de otras personas confirmaron que, en los pacientes con cáncer de páncreas que tenían diabetes, los cambios en el azúcar en la sangre tendían a aparecer dos o tres años antes del diagnóstico del cáncer.

De inmediato, la utilidad de este período de dos años fue obvia. Si la diabetes se presentaba primero, y el cáncer aparecía alrededor de dos años más tarde, se podría usar ese tiempo para hacer un seguimiento de los pacientes y aprender más sobre la manera en que los cambios celulares en el páncreas pueden dar lugar al cáncer.

Un nuevo estudio

Chari y sus colegas ayudaron a probar que las personas que tienen diabetes después de los 50 años tienen un mayor riesgo de padecer cáncer de páncreas que la población general. Ahora, él y sus colegas investigadores están profundizando su conocimiento con el estudio más grande hasta la fecha sobre el vínculo entre el cáncer de páncreas y la diabetes.

“Ha llevado mucho tiempo para que el mundo acepte este trabajo”, dice Chari. “Hace dos años, el NCI dijo que daba prioridad a la investigación sobre la conexión entre estas enfermedades. Ahora estamos haciendo un estudio sobre 10,000 personas con diabetes de reciente aparición en un consorcio de 10 centros, entre los que se encuentran Stanford, Cedars Sinai y Mayo”. En el mes de mayo, los investigadores se reunieron para finalizar su estrategia de incorporación de pacientes. El estudio pronto aceptará participantes.

Para formar parte, los pacientes deben ser mayores de 50 años, tener un nivel de azúcar en la sangre superior a 126, y no haber reunido los requisitos para un diagnóstico de diabetes en el pasado. “Queremos contar con pacientes que, idealmente, hayan recibido un diagnóstico recientemente”, explica Chari. “Por ejemplo, personas que han ido al médico para hacerse exploraciones de rutina, se les midió el azúcar en la sangre y se descubrió que estaba elevado”. Puede encontrar una lista de los centros de investigación participantes en el sitio web de Consortium to Study Chronic Pancreatitis, Diabetes, and Pancreatic Cancer.

“Comprender mejor cómo la diabetes afecta el páncreas podría abrir las puertas a nuevas estrategias de detección precoz”, afirma Chari. En la lucha contra el cáncer de páncreas, nada podría tener más impacto. “Lamentablemente, esta enfermedad toma a las personas por sorpresa. Para cuando uno se entera que la tiene, es demasiado tarde”, añade Chari. “Queremos encontrar alguna estrategia para su detección. Para el cáncer de páncreas, es indispensable”.

*Después de la publicación de esta historia, Chari se unió al MD Anderson Cancer Center en Houston, Texas.

Para obtener más información sobre el estudio del consorcio, visite cpdpc.mdanderson.org.