Investigación
21 de julio, de 2016 • 5 Min

Investigación centrada en el paciente para comprender mejor el cáncer de páncreas

Flasks

Amy; Flickr

En lo que respecta a la investigación del cáncer de páncreas, es difícil limitar la obra de la cirujana y científica Dra. Diane Simeone* a un solo tema.

La razón es que ella está involucrada en investigaciones no solo para comprender mejor la base molecular de una enfermedad que se ha demostrado que se resiste a muchos tratamientos, sino también para llevar rápidamente los hallazgos desde el laboratorio a la atención al paciente. Este enfoque de investigación aplicable ha demostrado ser el trabajo de su vida.

“Atiendo a pacientes casi todos los días y muchos de ellos no son candidatos a la cirugía e, incluso si lo son, todos sabemos que el pronóstico a largo plazo no es bueno para la mayoría de los pacientes que se someten a cirugía”, dice Simeone, quien es profesora de la cátedra patrocinada Lazar J. Greenfield de cirugía y fisiología en el University of Michigan Medical Center. También es directora y fundadora del Pancreatic Cancer Center de University of Michigan*.

“Simplemente necesitamos realizar un mejor trabajo de coordinación de la investigación para hacer que la investigación se aplique a los pacientes y seguir explorando esfuerzos científicos que puedan marcar una diferencia para nuestros pacientes”, agrega ella.

Ciencia al servicio de la atención al paciente

En 2007, el laboratorio de Simeone fue el primero en identificar las células madre del cáncer de páncreas, las células en un tumor que desencadenan el crecimiento y la propagación del tumor. Según ella, los tratamientos actuales para el cáncer en ocasiones fallan porque no atacan las células madre del cáncer.  El objetivo de su investigación en curso es entender más profundamente las células madre del cáncer para que se puedan elaborar medicamentos dirigidos para eliminar dichas células.

Su equipo ya ha podido identificar medicamentos que atacan estas células madre del cáncer bloqueando las vías de comunicación críticas que desempeñan un papel en el funcionamiento de estas células madre del cáncer. Y hay ensayos clínicos en curso para confirmar si estos medicamentos pueden funcionar.

“Es muy emocionante que este trabajo haya llegado a los ensayos clínicos, pero es posible que tengamos que combatir el cáncer de páncreas desde más de un solo ángulo”, dice Simeone, y agrega que en este tipo de cánceres, las células madre con frecuencia solo conforman un pequeño porcentaje de las células que se encuentran en un tumor pancreático. “El problema real ha sido y sigue siendo el hecho de que la mayor parte de las células de un tumor son agresivas y muy resistentes a los tratamientos”.

Su equipo puede haber encontrado la razón por la que el cáncer de páncreas es tan agresivo: un gen que descubrieron llamado ATDC que impulsa la formación de las células madre del cáncer en los tumores de los pacientes. El nombre técnico del gen es gen complementario de la ataxia telangiectasia grupo D. Su expresión (básicamente, cómo se “activa”) es 20 veces más alta en las células madre del cáncer de páncreas que en las células normales y sanas. También se expresa en niveles más altos cuando las células precancerosas se tornan malignas.

“Este gen impulsa el crecimiento rápido de las células cancerosas. Las hace agresivas y resistentes al tratamiento porque fomenta la formación de células madre del cáncer temprano en el proceso”, menciona Simeone. “Es posible que los medicamentos dirigidos puedan mejorar la reacción de las células a los tratamientos que ya están disponibles para los pacientes”.

Replicar el tumor de un paciente

Simeone imagina una época en la que una única muestra de sangre de un paciente con cáncer de páncreas pueda brindar suficiente información para personalizar el tratamiento y erradicar la enfermedad.

Su equipo de investigación ya ha desarrollado una técnica para aislar las células tumorales circulantes (células de un tumor que se dividen e ingresan en el torrente sanguíneo de una persona) y está colaborando con especialistas en cáncer de páncreas a nivel internacional para encontrar las maneras más eficaces de agrupar las células en un microtumor para estudiarlas en 3-D en el laboratorio. El objetivo: pruebas rápidas de combinaciones de medicamentos, personalizadas para ese paciente.

“En la actualidad, los médicos que tratan a pacientes con cáncer de páncreas simplemente suponen qué tipos de células se encuentran en un tumor y el objetivo es solo reducir el tumor”, explica Simeone. “Pero en realidad sabemos que algunas de las células en un tumor son más letales, más agresivas, que otras.

“Aislar las células cancerosas propias de un paciente a partir de una simple muestra de sangre y personalizar el tratamiento tiene el potencial de ser un gran avance, un punto de inflexión para los tratamientos”.

Hacer que los ensayos clínicos sean relevantes para los pacientes con cáncer de páncreas

Simeone tiene dos funciones: científica clínica y cirujana. Y es difícil (como lo es para cualquier profesional médico) decirles a los pacientes que la medicina y la ciencia no tienen nada más que ofrecerles. “Hemos avanzado, pero necesitamos hacer mucho más para que los hallazgos de la investigación sean relevantes para los pacientes”, dice ella. “Una manera de hacerlo es obtener más cooperación para los ensayos clínicos”.

Es por eso que Simeone está tan entusiasmada sobre su papel en una nueva iniciativa llamada Precision Promise, un esfuerzo audaz llevado a cabo por el grupo de promoción Pancreatic Cancer Action Network para proporcionar tratamientos personalizados y fundamentados, con un enfoque molecular, para cada paciente con cáncer de páncreas. Es un objetivo ambicioso, pero ella cree que es posible y absolutamente necesario. Simeone dirige en Estados Unidos la iniciativa Precision Promise.

“Queremos contar con ensayos diseñados específicamente para los pacientes”, dice Simeone, y menciona que los ensayos clínicos tradicionalmente se diseñan para encontrar pacientes que reúnan los requisitos para participar, requisitos marcados por el diseño del ensayo. Este nuevo enfoque que se propone coloca a los pacientes en el centro del diseño del ensayo y se espera que refleje las necesidades de los pacientes de forma más adecuada.

“La supervivencia del cáncer de páncreas con frecuencia se mide en meses, no se mide por los años que se tarda en completar los ensayos, muchos de los cuales no están bien diseñados”, explica ella. “El tipo de modelo cooperativo que propone Precision Promise nos permite ser más ágiles y contar con una colaboración real entre los investigadores, compañías farmacéuticas, médicos que están al frente de la batalla y tratan a los pacientes, y lo más importante, los pacientes y las familias afectados por esta enfermedad”.

Ella espera aumentar la cantidad de participantes en los ensayos clínicos para el cáncer de páncreas, que ha sido baja en comparación con otros tumores sólidos. “La proyección es que el cáncer de páncreas pasará del cuarto al segundo lugar como causa principal de muerte por cáncer en Estados Unidos para el año 2020. Es tan evidente que necesitamos hacer algo de inmediato para marcar una diferencia lo más rápido posible”.

Simeone tiene una gran esperanza. “Como médica y científica siempre voy a hacer muchas preguntas y gran parte de mi trabajo está en el laboratorio, pero también me desempeño como doctora y atiendo a pacientes. Y lo que quiero hacer es poder decirles a estos pacientes que la ciencia les está encontrando respuestas y produciendo cambios en la supervivencia. No podemos estar satisfechos a menos que cumplamos con ese objetivo”.

*Simeone se trasladó a New York University, donde se desempeña como directora del Pancreatic Cancer Center.