Investigación
10 de agosto, de 2020 • 7 Min

Ensayo PATHFINDER de análisis de sangre apunta a la detección temprana

Dr, Minetta Liu

En los últimos diez años se han realizado muchas investigaciones sobre la llamada “biopsia líquida”.

Mediante la biopsia líquida los científicos analizan biomarcadores en líquidos como sangre y orina —sustancias que indican la presencia de una enfermedad. La gran esperanza en la comunidad oncológica es que estas biopsias líquidas detecten el cáncer en su estadio más temprano y más tratable. A diferencia de la biopsia tradicional que usa muestras de tejido de un órgano como la mama o el páncreas, la biopsia líquida requiere una extracción de sangre, del tipo que le podrían hacer para su examen físico anual. Una prueba como esta —fácil de hacer y simple para el paciente— sería una gran ventaja para los enfermos con cáncer y los médicos que los tratan.

A través de un nuevo estudio llamado PATHFINDER se espera incorporar al arsenal de herramientas disponibles para los médicos el nuevo análisis de sangre para la detección temprana de varios tipos de cáncer. PATHFINDER es un ensayo clínico prospectivo patrocinado por la empresa de biotecnología GRAIL, Inc. de Menlo Park, California; como parte de su estudio llamado Atlas del Genoma Libre de Células Circulantes (CCGA) desarrolló una nueva prueba de detección temprana de varios tipos de cáncer. Esa investigación anterior ha dado como resultado algunos hallazgos muy esperanzadores.

“Como médica y científica, la posibilidad de contar con un análisis de sangre para detectar varios tipos de cáncer me atrae por muchos motivos”, dice la oncóloga Minetta Liu, M.D., profesora y catedrática de investigación del departamento de oncología de Mayo Clinic, Rochester, Minnesota. Liu es coautora de un artículo sobre el estudio CCGA en Annals of Oncology de junio de 2020. El estudio, que contó con miles de participantes, demostró que el análisis de sangre desarrollado por GRAIL es capaz de detectar en la sangre señales de más de 50 tipos de cáncer. Es importante destacar que el análisis de sangre también proporciona información precisa sobre el origen del tumor en el cuerpo.

“El cáncer de mama tiene un paradigma de detección, la mamografía, que tiene utilidad clínica, pero no es una herramienta perfecta. El cáncer de páncreas está en el otro extremo del espectro porque carece de detección universal, y a menudo se diagnostica más tarde, cuando la cirugía no es posible”, dice Liu. “Tiene sentido que la detección temprana haga posible mejorar el desenlace para los pacientes. Necesitamos mejores herramientas para identificar tumores malignos en el estadio más temprano posible”.

“El tratamiento del cáncer localizado consiste en cirugía y posiblemente radiación y terapia médica como quimioterapia. Si el cáncer se diagnostica suficientemente temprano, es posible que solo la cirugía baste. Como oncóloga, quiero reducir el uso de quimioterapia y otras sustancias sistémicas, todas las cuales tienen algún nivel de toxicidad”.

Los estudios iniciales sobre biomarcadores son prometedores

En el estudio CCGA patrocinado por GRAIL, los investigadores recolectaron muestras de sangre para analizar el ADN sin células, que es ADN de células normales y cancerosas que entra al torrente sanguíneo después de la muerte de la célula. El informe, publicado en Annals of Oncology, describe el desarrollo de un análisis de sangre para detectar diferentes tipos de cáncer, y representa los análisis de muestras de sangre de 6689 participantes (2482 diagnosticados con cáncer y 4207 sin cáncer).

Los participantes tenían más de 50 tipos de cáncer, incluidos tumores malignos muy agresivos y difíciles de tratar, como el cáncer de páncreas. Otros tipos de cáncer eran cáncer de mama, colorrectal, esofágico, de vesícula, de vejiga, gástrico, de ovario, de cabeza y cuello y de pulmón; leucemia linfocítica; mieloma múltiple y otros.

Para ser eficaz, la prueba de detección debe tener un alto grado de sensibilidad y especificidad. Sensibilidad significa que la prueba puede identificar correctamente una enfermedad como el cáncer. Especificidad significa que la prueba puede identificar correctamente a quienes no tienen la enfermedad.

La especificidad general del análisis GRAIL fue del 99.3 %. Eso significa que solo el 0.7 % de los resultados indicaron erróneamente la presencia de cáncer. La sensibilidad de la prueba para 12 tipos de cáncer que representan aproximadamente dos tercios de las muertes por cáncer en Estados Unidos fue del 67.3 %. Eso significa que la prueba detectó cáncer aproximadamente dos tercios de las veces, y que la señal de cáncer estaba ausente en la sangre un tercio de las veces.

Con respecto a los 12 tipos de cáncer de alta mortalidad, la sensibilidad fue del 39 % para pacientes con cáncer en estadio I, 69 % para aquellos en estadio II, del 83 % para aquellos en estadio III, y del 92 % para aquellos con enfermedad en estadio IV. Con el aumento de la carga tumoral que ocurre con el avance del estadio de la enfermedad, se espera una mayor detección. En los 50 tipos de cáncer, la sensibilidad para los estadios I a III fue del 43.9 %.

Lo que es particularmente importante para médicos como Liu es que cuando se detectó el cáncer, el análisis identificó correctamente el órgano o tejido de origen en más del 90 % de los casos. “Contar con un análisis de sangre para diferentes tipos de cáncer que detecte una señal general E indique el sitio del tumor primario con una certeza relativamente alta es fundamental para orientar los estudios de confirmación. Nadie quiere someter a los pacientes a pruebas innecesarias”.

Cabe señalar que una prueba de detección temprana de múltiples tipos de cáncer detecta y localiza pequeñas cantidades de señal tumoral circulante en la sangre, mientras que una biopsia líquida investiga tumores en pacientes ya diagnosticados. Según GRIAL, la detección temprana de diferentes tipos de cáncer es un desafío técnico complejo que requiere estudios mucho más grandes en comparación con los de biopsia líquida y conjuntos de datos a escala de población para desarrollar los algoritmos de aprendizaje automático necesarios para emplear la prueba en la vida real.

Búsqueda de patrones

Como parte del CCGA, se evaluaron varias técnicas de secuenciación de ADN. El método seleccionado como la prueba de GRAIL utiliza sofisticadas técnicas de secuenciación para identificar los patrones de unidades químicas específicas denominadas grupos metilo. Los grupos metilo se encuentran en partes específicas del ADN. Su función es controlar los genes al activarlos o desactivarlos. Cuando una célula es normal y no maligna, estos grupos metilo forman un patrón reconocible que les dice a los investigadores que todo está bien con esa célula. Sin embargo, si una célula es cancerosa, por ejemplo, el patrón de los grupos metilo es diferente.

El llamado proceso de metilación del ADN ha sido objeto de mucha investigación; participa en varios procesos patológicos, como la aparición y la progresión del cáncer. Los patrones de metilación dan información complementaria a las mutaciones de ADN en un tumor maligno. “El hecho de que los patrones de metilación sean similares en el ADN del tejido tumoral y el ADN libre de células en la sangre da mayor validación a la prueba de GRAIL de detección de cáncer en estudios prospectivos con personas sanas o en riesgo sin diagnóstico conocido”, dice Liu.

El estudio PATHFINDER

PATHFINDER es un estudio prospectivo y multicéntrico. Es la primera vez que los resultados de las pruebas de GRAIL se entregan a los proveedores de atención médica y se comunican a los participantes del estudio para ayudar a orientar las pruebas de diagnóstico.La capacidad de la prueba de GRAIL para identificar con precisión en qué parte del cuerpo se encuentra el cáncer permitirá a los proveedores de atención médica guiar a los participantes del estudio PATHFINDER que tengan un resultado de la prueba de “detección de señal” de cáncer a través de la ruta apropiada para llegar al diagnóstico definitivo. La prueba de GRAIL aún no está disponible fuera de este estudio de investigación. Su propósito es complementar, no reemplazar, las pruebas actuales de detección de cáncer.

En el estudio PATHFINDER se inscribirá aproximadamente a 6200 participantes; se realiza con aprobación de la FDA de una solicitud de exención de dispositivo de investigación (IDE) para el análisis de sangre de GRAIL de detección temprana de múltiples tipos de cáncer. Los participantes deben ser mayores de 50 años y no tener cáncer; el 70 % de la cohorte serán personas con alto riesgo de cáncer (como antecedente de tabaquismo), y el 30 % serán personas con un riesgo normal de cáncer.

Los socios iniciales de PATHFINDER son Dana-Farber Cancer Institute (Boston), Intermountain Healthcare (Salt Lake City, Utah), Mayo Clinic (Rochester, Minnesota), Oregon Health & Science University (Portland) y Sutter Health (Sacramento, California); se tiene previsto incorporar más socios.

Liu es la investigadora principal de PATHFINDER en Mayo Clinic. “Muchos pacientes preguntan si hay algún análisis de sangre para detectar cáncer”, dice. “PATHFINDER dará datos iniciales sobre el posible valor del análisis para facilitar un diagnóstico de cáncer más temprano. Estudiaremos la precisión del análisis de sangre para detectar cáncer en general y para identificar específicamente el tejido de origen. Es importante destacar que recopilaremos información sobre la cantidad y el tipo de estudios necesarios para abordar un resultado de "detección de señal", así como las percepciones de los participantes sobre el análisis y la detección de cáncer en general”.

Liu afirma que “las tecnologías actuales permiten a los investigadores aislar y estudiar el material tumoral en la sangre. Soy optimista; creo que tendremos una prueba de sangre que facilitará la detección del cáncer. Se está trabajando para desarrollar pruebas para detectar un solo tipo de cáncer, y pruebas para detectar múltiples tipos. Tenemos que evaluar ambos métodos para determinar cuál es el más confiable y rentable”.