Se abre en Columbia un ensayo de oncología de precisión de ARN para cáncer de páncreas
En los últimos años ha habido una tendencia hacia la así llamada medicina de precisión para el tratamiento del cáncer.
Para los enfermos con cáncer de páncreas y de otros tipos, la medicina de precisión significa usar medicamentos para atacar mutaciones específicas en los genes con la esperanza de retrasar la progresión de la enfermedad. Para algunos tipos de cáncer, como ciertas formas de cáncer de pulmón, este enfoque dirigido ha cambiado el tratamiento, y permite una supervivencia más larga sin progresión de la enfermedad.
Pero algunos estudios recientes, como los publicados por investigadores de Broad Institute (Cambridge, Massachusetts), muestran que, entre todas las “ómicas” (las disciplinas de biología con nombres que terminan en “ómica”, como genómica), las mutaciones en el tumor pueden ser el peor predictor de respuesta a los medicamentos. El cáncer de páncreas, en particular, es uno de los desafíos más difíciles que enfrentan los oncólogos. Y aunque sigue siendo uno de los tumores malignos más letales, la comunidad clínica y de investigación mantiene la esperanza de que un mejor conocimiento de los aspectos genéticos clave conducirá a regímenes más eficaces dirigidos a estas alteraciones.
Algunos científicos están tomando un rumbo diferente; no se concentran en los genes, sino en las proteínas. Según la biología básica, los genes son fragmentos de ADN, el material genético de la mayoría de los organismos. Los genes son responsables de la producción de proteínas, que le dicen a la célula qué hacer. Una rama de la ciencia llamada biología de sistemas podría ayudar a los investigadores a encontrar un mejor enfoque para el tratamiento del cáncer al centrarse precisamente en las proteínas llamadas reguladoras principales, en vez de en las mutaciones. A la vanguardia de la biología de sistemas está el Dr. Andrea Califano, profesor de Biología Química y de Sistemas en Columbia University Irving Medical Center (Nueva York); también se desempeña como Presidente del Departamento de Biología de Sistemas y como director del JP Sulzberger Columbia Genome Center, Herbert Irving Comprehensive Cancer Center.
La tecnología que él y sus colegas desarrollaron se llama OncoTreat™. Recientemente se inició un nuevo ensayo clínico en Columbia para comprobar la viabilidad de utilizar la nueva plataforma OncoTreat™ para administrar terapia personalizada a pacientes con cáncer de páncreas avanzado.
El ensayo de oncología de precisión de ARN
El estudio se llama Oncología de precisión de ARN en cáncer de páncreas avanzado (HIPPOCRATES); en su fase inicial reclutará a 30 participantes.
Los participantes se asignarán a uno de dos grupos. En el grupo de intervención experimental, los investigadores darán seguimiento a los participantes que cumplan con los criterios de elegibilidad (según una muestra de tejido que proporcionaron) para obtener información médica cada cuatro semanas. La información recopilada incluirá una revisión de la historia clínica, el contacto con el médico tratante del participante o el contacto personal entre el participante y los investigadores de Columbia University Irving Medical Center. Durante el estudio se evaluará el tejido tumoral para identificar medicamentos que puedan ayudar a tratar el cáncer.
Expertos de un Comité de Medicina de Precisión para Tumores revisarán los resultados de estas pruebas. Un Comité de Medicina de Precisión para Tumores está compuesto por un equipo de expertos clínicos en oncología de precisión que colaboran para identificar las mejores opciones de tratamiento. Por lo general el comité cuenta con oncólogos, patólogos, cirujanos, radiólogos, inmunólogos, asesores genéticos y otros profesionales que se reúnen periódicamente para revisar casos de pacientes y los posibles más nuevos tratamientos.
Estos expertos pueden recomendar un tratamiento específico al participante o a su médico. El grupo de observación es para los participantes que no cumplen con los criterios de elegibilidad según su muestra de tejido. Los médicos tratantes de estos participantes les darán seguimiento hasta cada cuatro semanas para recopilar información clínica de su enfermedad.
El resultado principal del estudio es determinar si a un sujeto se le asigna una terapia que puede comenzar en la segunda fase del estudio. La asignación de la terapia se basa en los resultados del análisis de OncoTreat™ y las recomendaciones de la Junta de Medicina de Precisión, que incluye la determinación de la disponibilidad y la toxicidad esperada de los fármacos identificados.
En los primeros ensayos con muestras de tumores de páncreas, OncoTreat™ identificó al menos un medicamento compatible para más del 90 % de los pacientes. El equipo de Columbia de Califano y el Dr. Kenneth Olive, profesor adjunto de Medicina y profesor adjunto de Patología y Biología Celular, recibió una subvención de $2.2 millones de Lustgarten Foundation para financiar un ensayo clínico con OncoTreat™ en pacientes con cáncer de páncreas, así como estudios preclínicos relacionados.
“Estoy muy emocionado de que estemos avanzando en esto”, dice Califano. “Este puede ser un punto de entrada fundamental para identificar posibles terapias combinadas para pacientes con cáncer (de páncreas). De hecho, recientemente hemos demostrado que casi todos los casos de cáncer de páncreas tienen células en diferentes estados de transcripción y, por lo tanto, son sensibles a diferentes medicamentos”.
“Esto puede explicar por qué estos tumores son tan difíciles de tratar con terapia convencional y dirigida: solo algunas de sus células responden, mientras que las otras regeneran todo el tumor hasta que encuentran la receta molecular para eludir incluso ese tratamiento inicialmente eficaz”.
Aunque buscar mutaciones en el ADN tiene sentido, es importante recordar que “el cáncer de páncreas no es como la leucemia mielógena crónica, para la que hay un medicamento como imatinib (Gleevec) dirigido contra el impulsor genético dominante de la enfermedad, que sin duda transformó vidas”, dijo Olive a Let’s Win. “Entre los enfermos con cáncer de páncreas, tal vez el 15% tienen una mutación que se puede corregir.
Tenemos que ayudar al otro 85%”.