Tratamientos
5 de agosto, de 2016 • 3 Min

Trabajar con su médico para encontrar ensayos clínicos

Dra. Kim A. Reiss

Hands covered in blue vinyl gloves working in a science lab

Daniel Sone, National Cancer Institute, National Institutes of Health

Como oncólogos, nos capacitan para que usemos la información que se nos presenta con el fin de tomar decisiones sobre los mejores tratamientos para nuestros pacientes.

¿Qué tan sano está el paciente? ¿Qué otros problemas médicos tiene? ¿Cuál es el grado de enfermedad que tiene? ¿Cuáles son sus deseos personales? ¿Cuáles son las publicaciones más recientes sobre los tratamientos disponibles?

Dependemos en gran medida de los ensayos clínicos que realizamos nosotros mismos y que realizan nuestros colegas, en particular cuando un paciente presenta un tipo de cáncer que es difícil de tratar. Algunos ensayos son estudios muy grandes y bien elaborados que nos brindan confianza en nuestras opciones de tratamiento. Pero, a menudo, solo ha habido ensayos pequeños y aislados de diversos tratamientos. A veces, no hay datos que coincidan con una situación específica.

Pensar de manera creativa sobre tratamientos y ensayos clínicos

Para el cáncer de páncreas, el panorama de tratamientos no está nada claro. Históricamente, los tratamientos disponibles para el cáncer de páncreas no han sido en absoluto lo eficaces que necesitamos que sean. Debido a esto, los pacientes y los médicos deben pensar cuidadosamente y de manera creativa sobre cada decisión relacionada con el tratamiento. Los tratamientos habituales son definitivamente una parte importante del tratamiento, pero los médicos y los pacientes deben evaluar cuidadosamente las demás opciones en cada etapa.

Es importante comprender que no todos los cánceres de páncreas son iguales. La mayoría son esporádicos; es decir, se manifiestan al azar sin causa aparente. Otros son causados por mutaciones en los genes. Estas mutaciones pueden transmitirse en las familias o pueden producirse de manera espontánea. Todos los días aprendemos que un análisis minucioso de cada paciente y sus tumores puede conducirnos a una terapia que esté mejor dirigida a esa persona.

La importancia de los antecedentes familiares

Un primer paso importante es conocer los antecedentes familiares de cáncer. Los antecedentes familiares pueden revelar pistas sobre si el tumor está ligado a un gen o síndrome específicos. La secuenciación del tejido tumoral, que utiliza técnicas de laboratorio para analizar la constitución genética del cáncer específico de un paciente, también puede, en ocasiones, descubrir una mutación para la cual puede haber un medicamento aprobado y disponible. O el paciente puede reunir los requisitos para participar en un ensayo clínico disponible.

Estos tipos de enfoques personalizados frecuentemente, aunque no siempre, están más fácilmente disponibles en centros médicos académicos. La investigación es lo que impulsa a los grandes centros académicos y, por lo tanto, estos pueden tener acceso a tecnología y ciencia de vanguardia. Además, los oncólogos de los centros académicos se centran en una enfermedad o en un pequeño grupo de estas. Esto significa que el oncólogo con el que consultará en un centro académico pasa todo el tiempo estudiando la enfermedad que usted padece. Por lo tanto, este oncológo tendrá mayores probabilidades de estar al tanto de la información más reciente.

Qué hacer

Como paciente que ha recibido un diagnóstico reciente, ¿qué deben hacer usted o sus familiares?

En primer lugar, si tiene antecedentes familiares de cáncer (incluso si no se trata de cáncer de páncreas), asegúrese de que su oncólogo lo sepa.

En segundo lugar, pregunte sobre la secuenciación tumoral y las pruebas de inestabilidad de microsatélites (microsatellite instability, MSI), un hallazgo inusual, pero importante, que puede significar que su tumor podría responder a la inmunoterapia. La genética de su tumor puede ayudar a determinar qué tratamiento aplicar y qué podría no ser eficaz.

En tercer lugar, investigue sobre ensayos clínicos. Ningún médico puede conocer todos los ensayos disponibles, pero la información está disponible en línea. Otra forma de enterarse de los ensayos es conectarse con las diferentes organizaciones que siguen los ensayos clínicos actuales. Estos grupos le ayudarán a encontrar información. Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) y Pancreatic Cancer Action Network mantienen bases de datos en internet donde se pueden hacer búsquedas en ClinicalTrials.gov y en Let’s Win Trial Finder (buscador de ensayos clínicos), respectivamente.  Cuando encuentre un ensayo clínico en el que esté interesado, llévele la información a su oncólogo y analícela con su equipo médico.  Considere si valdría la pena hacer un viaje hasta un centro médico académico para obtener una segunda opinión.

Podrán trabajar juntos para encontrar las mejores terapias que se adapten a su tipo de cáncer y a sus necesidades de salud.

La Dra. Kim A. Reiss es oncóloga en el Abramson Cancer Center del hospital de University of Pennsylvania en Filadelfia.