Sea su propio defensor

- La ictericia en los ojos llevó al diagnóstico
- Primero, diagnóstico equivocado de tumor en el conducto biliar
- Cirugía para extirpar el tumor
- Quimioterapia después de la cirugía
Nadie quiere despertarse una mañana y ver una coloración amarillenta en los ojos.
A principios de 2022 mi médico, el Dr. Tejas Joshi, me recomendó que bajara de peso. Ya estaba tomando Jardiance, una píldora para tratar la diabetes, así que me recetó Ozempic. Empecé a bajar de peso, pero él me hizo análisis de sangre para asegurarse de que todo estuviera bien. Descubrimos que mis enzimas estaban muy alteradas. Al mismo tiempo, mi hija y yo notamos que mis ojos estaban un poco amarillentos.
Yo trabajaba en el Cabell Huntington Hospital en Huntington, West Virginia, así que el Dr. Joshi me derivó al Dr. Wes Frandah, un gastroenterólogo intervencionista, para hacerme una colonoscopia y luego una ERCP. El Dr. Frandah vio una pequeña masa donde el conducto biliar se une con el páncreas. Tendría que someterme a un procedimiento de Whipple para extirpar el cáncer.
Ni un momento que perder
Tuve la suerte de que lo detectaran muy temprano, y aun así, no había ni un momento que perder. Mis médicos me recomendaron al Dr. Michael Cavnar en UK HealthCare (Lexington, Kentucky), a unas dos horas de mi hogar en Huntington. Me operaron en mayo. La cirugía salió bien, con bordes limpios, sin cáncer. El médico también realizó un análisis genético del tumor. Estuve en UK HealthCare unas dos semanas porque tenía mucho dolor.
Después del alta me fui de crucero a Alaska con mi familia, un viaje que habíamos planeado desde hacía tiempo y que comenzó el fin de semana del 4 de julio. En ese momento, todavía creíamos que era cáncer de conducto biliar y que la cirugía de Whipple era el único tratamiento que necesitaba. Pero cuando regresé me enteré de que un análisis más detallado de las células mostró que tenía un adenocarcinoma de páncreas en estadio I. Tendría que recibir quimioterapia.
Comencé la quimioterapia en Cabell. Después de un par de ciclos empecé a sentir entumecimiento en todo el cuerpo. Tuvieron que ajustar los medicamentos para que pudiera tolerar el tratamiento.
La vida después del tratamiento
¡El tratamiento funcionó! Desde mayo de 2022 no tengo tumores. Sin embargo, me quedan algunos recordatorios de la enfermedad. Tengo que tomar enzimas pancreáticas (nombre comercial Creon) y vitaminas. He perdido mucho peso, que era necesario. Tengo dolor crónico en la espalda y el cuello, por lo que tomo opioides, y como resultado sufro de estreñimiento crónico. El Dr. Scott Mitchell me maneja el dolor.
Durante este proceso he comprendido lo importante que es tener una relación sólida con los médicos. Gracias a mi trabajo en el Cabell Huntington Hospital, conocía bien a mis médicos. Todos fueron excelentes.
Más importante aún, no puedo recalcar lo suficiente la importancia de las pruebas y la detección temprana. ¡Hágase chequeos médicos con regularidad! Todos tenemos que ser nuestros propios defensores, incluso si conocemos bien a los profesionales. ¡La detección temprana podría salvarle la vida!
