Pancreatitis y cáncer de páncreas llevan a correr maratones
- Episodios repetidos de pancreatitis
- Diagnóstico de neoplasma mucinoso papilar intraductal (IPMN)
- Cirugía de Whipple lleva a la detección del cáncer
Me enteré de que tenía cáncer de páncreas después de mi cirugía de Whipple el 17 de noviembre de 2015. Tenía 45 años.
A mediados de diciembre de 2014, empecé a tener un dolor abdominal intenso que irradiaba hasta la espalda, además de náuseas y vómitos. Consulté con el Dr. Michael Sanders, un gastroenterólogo en mi ciudad natal de Mobile, Alabama, el 18 de diciembre de 2014. Sospechó que tenía pancreatitis, así que analizó mis niveles de amilasa y lipasa, y las cifras eran muy altas. Me ingresaron en el hospital, donde pasé varios días. Pronto mejoré y me dieron de alta.
Tuve otro episodio de pancreatitis en agosto de 2015, y este episodio fue mucho peor. Me ingresaron nuevamente, pero la pancreatitis no se curaba. Terminé alimentándome por medio de una sonda y contraje una infección estafilocócica. Me trasladaron al Ochsner Medical Center en Nueva Orleans, Luisiana, para una posible cirugía del páncreas y para tratar la infección. Esta vez, me realizaron varias pruebas, entre ellas una colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (ERCP), una ultrasonografía endoscópica (EUS), tomografías computarizadas y una resonancia magnética. Pero debido a la inflamación y al estado general del páncreas, no encontraron nada significativo en ese momento. Los médicos de Ochsner terminaron colocándome un stent en la cabeza del páncreas, dado que el conducto biliar principal estaba inflamado. Tardé casi 30 días en recuperarme, pero finalmente mejoré y me dieron de alta.
Tercer episodio de pancreatitis y un nuevo diagnóstico
Pero en octubre me enfermé de pancreatitis una vez más. Los médicos me hicieron más pruebas, que otra vez incluyeron una resonancia magnética, ERCP y una tomografía computarizada. Descubrieron lo que pensaban que era un neoplasma mucinoso papilar intraductal (IPMN) en la cabeza del páncreas. Los médicos creían que esto era lo que me causaba la pancreatitis. El Dr. Sanders me recomendó que me hiciera una cirugía de Whipple. Mi esposa y yo nos reunimos con varios cirujanos en Ochsner (Nueva Orleans), Mobile Infirmary (Mobile) y Johns Hopkins (Baltimore). Decidimos que el Dr. John Cameron de Johns Hopkins me hiciera la cirugía de Whipple.
La cirugía se realizó el 17 de noviembre de 2015. Después me enteré de que tenía un tumor maligno en la cabeza del páncreas. El cáncer no se había propagado a los ganglios linfáticos, por lo que mis médicos consideraron que no necesitaba tratamientos de quimioterapia o radiación. Había tenido muy pocos efectos secundarios después de la cirugía de Whipple además de hacer unos pequeños cambios en mi alimentación. No he necesitado enzimas ni otros tratamientos. Me hago una tomografía computarizada cada seis meses en Johns Hopkins como seguimiento. La última fue a mediados de marzo de 2019 y la tomografía no mostró cáncer, el resultado no mostraba ningún problema. Llevo casi 3 años y medio sin cáncer.
La alegría de los maratones
Cuando me estaba recuperando en Johns Hopkins, le dije a mi esposa que quería correr un maratón. Ella me dijo “Estás loco”, pero yo estaba decidido. No era un corredor y solo había corrido unas pocas carreras de 6 km hace 20 años, y eso fue antes de tener cáncer de páncreas.
Bueno, corrí el primer maratón de mi vida en el Maratón de Chicago del 2017, donde formé parte del equipo de Project Purple. Luego corrí el Maratón de Nueva Orleans en la primavera de 2018 y terminé el Maratón de Nueva York en noviembre de ese mismo año, donde otra vez corrí para Project Purple. Mi mejor marca personal fue 4:25:01 en el Maratón de Tokio el 3 de marzo de 2019 para el Ronald McDonald House of Japan. Me estoy entrenando para el Maratón de Londres el 28 de abril de 2019, donde recaudaré dinero para Pancreatic Cancer UK (Londres). También voy a participar en el Maratón de Berlin el 29 de septiembre de 2019 mediante lotería. Después del Maratón de Chicago, se me ocurrió la loca idea de correr los seis Abbott World Marathon Majors (Grandes del Maratón Mundial). Si no me lesiono y puedo terminar las tres carreras para las que me estoy entrenando en 2019, voy a correr el Maratón de Boston en 2020 y recibiré una medalla de seis estrellas.
El hecho de haber ganado la batalla contra el cáncer de páncreas y de ser un sobreviviente ha cambiado mi perspectiva de la vida y mis objetivos de vida. Peso 30 libras (13.6 kg) menos, ya no tengo que tomar medicamentos para el colesterol, e intento vivir cada día al máximo y ser la mejor persona que puedo ser.