El diagnóstico temprano es importante
- Dolor de espalda y antecedentes familiares
- Diagnóstico en estadio I
- BRCA2+
- Pancreatectomía y quimioterapia
El diagnóstico temprano es fundamental cuando se trata del cáncer de páncreas.
En el año 2021, me diagnosticaron adenocarcinoma de páncreas. Tenía 49 años en ese momento y logramos detectarlo en el estadio I. Las cosas podrían haber sido diferentes. Tuve muchísima suerte.
Los antecedentes familiares me pusieron en alerta
El cáncer de páncreas está presente en mi familia. Tanto mi hermano como mi primo hermano fueron diagnosticados justo antes que yo. Mi madre también ha tenido dos tipos diferentes de cáncer de mama. Sabía que debía estar alerta. Una vez que recibí mi diagnóstico, el médico me envió a un asesor genético para realizar pruebas. Di positivo para la mutación BRCA2+. Saber que tengo esta mutación permitió que mi médico, el Dr. Joshua Barton del St. Luke’s Cancer Center en Boise, Idaho, creara un mejor plan de tratamiento.
El primer paso en mi tratamiento fue una pancreatectomía. Luego recibí quimioterapia con FOLFIRINOX durante ocho meses, la cual me administraron mediante una “bomba de quimio” (una infusión continua con una bomba portátil). ¿Puede creer que de verdad extraño ir a mis citas de quimioterapia? ¡El personal fue increíble!
Tuve muy poco dolor durante todo mi tratamiento. No perdí el cabello. Además, pude mantener el peso. Los únicos efectos secundarios que tuve fueron pérdida de memoria a corto plazo y neuropatía. También he tomado Ozempic desde mi cirugía para controlar el nivel de azúcar, ya que me extirparon la mayor parte del páncreas.
Bienestar otra vez
Desde que completé el tratamiento, sigo sin cáncer y me siento mejor que cuando tenía veinte años. Soy la imagen de una tienda local de ropa formal y, al igual que los otros sobrevivientes de cáncer en mi familia (mi hermano, mi primo y mi mamá), he vuelto a trabajar y me siento plena.
Mi consejo para las otras personas, además de obtener un diagnóstico lo más temprano posible, es vivir una vida lo más normal posible mientras estén en tratamiento. El miedo y el estrés empeoran todo. No soy ignorante: este diagnóstico es grave. Pero ahora hay muchos más sobrevivientes. Necesitamos ver y escuchar a más sobrevivientes. Recuerde siempre que todo estará bien.
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